Este es un Blog para los Radicales de tomo y lomo.

DE PIE RADICALES CHILENOS. LEALES PERO NO SUBORDINADOS, SOCIOS POLITICOS, NO COMPLICES

jueves, 5 de julio de 2007

GRACIAS DON ARNO.


Don Arno:

Yo conocí Chiguaya ( no lo nombro completo y Ud sabe por qué), cuando íbamos a Hualqui a comer unos corderitos asados al palo y mi gran amigo Caupolicán Athens, radical y profesor del Liceo Enrique Molina era nuestro anfitrión.

Me he estado tratando de acordar de otros chiquillos, pero parece que estoy medio cloto, no me acuerdo mucho, el pepe Goñi era un cabrito de la J.R. y había otros que se reunían en el Yungay de calle Freire.

Ah, los ferroviarios se juntaban en una residencial de calle Prat, me parece que era de un señor de apellido Ramírez o algo así.

Y para que le cuento cuando hacíamos reunión en Lirquen, tratábamos de no hacer votación, porque la teníamos que votar a concha alzada.

Sabe, hace como dos años fui por allá, y no me gustó, como no sabia de la variante nueva, nos fuimos por Bulnes, claro que lo hice con cierta maldad porque quería pasar por Quillón para tomar un vinito soleado que por esos lados son muy ricos, y cuando pasamos Chaimavida, en el Lada de mi compadre Lucho, que no conocía por allá le dije, se va ir de poto compadre, Concepción es muy lindo, y de pronto estábamos encima del Biobio, salimos para el otro lado, para encontrar la vuelta llegamos casi a Escuadrón, de vuelta nos metimos por el puente del medio, y desde la parte alta vi la estación, me relaje un poco y me prendí un puchito, y entre recoger la cajetilla que me cayó por culpa de un hoyo y al levantar la cabeza, ya estábamos llegando a Cosmito, y Ud que es de allá, para volver poco menos que hay que llegar a Penco, hasta donde estaba antes la Crav.
Ya que estábamos en Penco le dije a mi compadre que porque no nos pasábamos a comer alguna cosita (pensaba en una merlucita frita con cualquier cosa y un buen vaso de vinito blanco Italia, pero nos encontramos con puras shoperias), oiga don Arno, las calles de Penco están igualitas de cuando anduvimos haciéndole la campaña al paqueton Duran el año 64.

La cuestión es que andábamos medio choreado, con hambre y lo peor, con sed; ya, le dije a mi compadre, nos vamos despacito y para no pasarnos de largo nos vamos a meter por el puente viejo, por ahí hacían unos cocimientos de miedo, y debo confesar que me equivoqué y agarramos por una calle que pasa por un corte de cerro y en un dos por tres estábamos cerca del puente perales… eran ya como las seis de la tarde, ya le dije, vamos a comer a la UECH y como en la canción, no había toro, no había arena, no había naa… así que terminamos comiendo unos sándwich plásticos con unas bebidas en vasos plásticos en un servicentro.

Gracias a la buena voluntad de una señora que nos dio detalladamente las indicaciones y por fin llegamos al Hotel Concepción, para que le digo, no había servicio de comedor pero nos recibieron muy amablemente y el precio bastante justo.

Sabe don Arno, Concepción dejó de ser ciudad para transformase en un lugar crucero, después le cuento la vergüenza que pase cuando le quise mostrar a mi compadre la ciudad… cuando trabajé en Correos que funcionaba en calle O’Higgins con ColoColo era tan grato salir, en la esquina se paraban las micros de la base naval, caminaba una cuadra y a la vuelta estaba "la parroquia", todos se saludaban, las comidas que se organizaban en Los Copihues (Castellón con Rozas) con su típico plato chuletas con puré picante eran inolvidables, y el bajativo donde la Tía o donde el Améstica. Esperar cagado de frio la salida de El Sur y La Patria para saber las noticias, los desayunos en el mercado, la sal de fruta de la Farmacia San Pedro, una partidita de pool donde Salomón o el Victor… claro que cuando nos vinimos , le dije a mi compadre Lucho, “Que veinte años no es nada” es una soberana mentira.

Asi y todo, hay mucha gente linda, amable y cariñosa, y para hacewr el viaje mas que especial, tuvimos que pasar por Yumbel a dejarle una monedas al Santo por encargo de la Escolástica, no ve que le conté que tiene problemas con las várices, y no se quiere operar de puro miedo, porque mi sobrino que es médico cirujano le ha ofrecido varias veces operarla y a "precio de huevo" en el Jota Aguirre, pero ella no acepta que el cabro chico, como ella le dice, la vea casi desnuda y menos esas partes, porque tiene varices cerca del "buzón" Ud me entiende ¿verdad?

Bueno, yo sólo quería agradecerle su visita a mi blog y sus amables palabras, disculpe que me extendí un poquito, pero Ud sabe como somos los radicales, cuando nos dan la palabra a veces abusamos...